A finales del siglo pasado, la ciudad floreció con elegantes villas, perfumados jardines y suntuosos hoteles que, aún hoy, con sus sugestivas arquitecturas modernistas, caracterizan su imagen. Un espléndido ejemplo de estilo arquitectónico de Sanremo está constituido por el famoso Casino Municipal, edificio modernista de Eugenio Ferret.

La ciudad conserva una parte antigua, llamada “Pigna”, que corresponde al burgo medieval, rico de callejuelas y casas que se remontan al siglo XIII.
No deben perderse la Colegiata de San Siro, del siglo XIII-XIV, edificio románico-gótico con puerta ojival capialzada, ajimeces y rosetón central. En el interior se conservan pinturas y esculturas del siglo XVI. Interesante también el adyacente Baptisterio medieval, modificado durante la época barroca.
De interés artístico son también la Iglesia ruso-ortodoxa, con numerosas cúpulas polícromas, y el Museo Arqueológico que se encuentra en el Palacio Borea del siglo XVII.

El evento más importante de la ciudad es, sin duda alguna, el histórico Festival de la Canción Italiana, que se ha convertido en uno de los eventos populares más típicos de la ciudad, sin olvidar además que se celebran muchos otros eventos.

Entre ellos y permaneciendo siempre en al ámbito artístico, cabe señalar el Premio Tenco para la canción de autor y los festivales Sanremo Jazz y Blues.
Otra manifestación importante es Sanremo en flor, dedicada a uno de los símbolos de la ciudad.

Por otra parte, no deben olvidarse los eventos deportivos más característicos como el Rally automovilístico y la celebérrima carrera de ciclismo Milán-Sanremo.
Sanremo no significa sólo Festival o Casino; de hecho, no todos saben que en la Ciudad de las Flores, gracias al clima excepcionalmente templado, es posible practicar todo el año numerosos deportes entre los cuales recordamos golf, tenis, hípica y tiro al vuelo.